Los volcanes Popocatépetl y Pico de Orizaba serán objeto de investigación por parte de una dirección estatal conformada por especialistas, encargados de analizar diferentes fenómenos que ayudarán a la elaboración un manual preventivo.
Ramón Peña Melche, ex director del Plan Operativo Popocatépetl (despedido en el gobierno marinista), indicó que la prevención consiste en educar permanente a la población sobre cómo reaccionar en caso de contingencias.
Dijo que las continuas exhalaciones de vapor de agua y gas del volcán Popocatépetl sin lluvia de ceniza son normales porque obedecen a descargas del manto freático.
Debido a que la cámara magmática se localiza entre 6 y 8 kilómetros de profundidad su actividad es superficial y no representa ningún riesgo a la población sea temporada de calor o frío.
“El volcán demuestra estabilidad interna sin ningún incremento en sus niveles de actividad, no hay nada para alarmarse”, mencionó el especialista.
Además de fortalecer las unidades de Protección Civil en los Municipios, puntualizó que los Ayuntamientos han cumplido paulatinamente en la reparación de los caminos de las comunidades que conectan al Popo.
En los alrededores de “Don Goyo” habitan más de 200 mil personas entre las zonas de peligro mayor y moderado. En los últimos años se ha registrado disminución de un flujo de lodo en la cara norte del volcán a consecuencia de la reducción del glaciar.
PATRICIA ESTRADA SÁNCHEZ