Celia Guerrero.-
La tarde del 10 de septiembre de 2020, Neydi Araceli Tzab Tuk, una mujer de 24 años con 36 semanas de embarazo, comenzó a convulsionar en su casa en X-Pichil, en la zona maya de Quintana Roo. Un día después, moría intubada en el Hospital General de Playa del Carmen, a unas tres horas de su comunidad, sin que sus padres pudieran llevarse su cuerpo ni el de su nieta.
Neydi Araceli Tzab no había tenido ningún síntoma de “la enfermedad”, como llaman sus padres al coronavirus. Tampoco ellos, su yerno o su nieto de dos años, a pesar de vivir todos juntos. Cuando Aurelia Tuk Dzul e Isabel Tzab Dzul llegaron la tarde del 11 de septiembre al hospital, después de 200 kilómetros de viaje, pensaban que a su hija la estaban atendiendo desde la madrugada de una emergencia obstétrica, pero llevaba dos horas muerta. Según su acta de defunción, sufrió una eclampsia —convulsiones durante el embarazo— 22 horas antes de su muerte; seis horas antes ocurrió la muerte fetal; finalmente, un choque séptico. En el apartado de “otros estados patológicos” del documento se lee: “caso sospechoso Covid”.
Neydi Araceli Tzab fue una de las 934 mujeres que murieron el año pasado en el embarazo, durante o después del parto en México, según la Dirección General de Epidemiología. En 2020 la mortalidad materna —la relación entre las muertes maternas y los nacidos vivos por cada 100,000 nacimientos— aumentó 46%, de acuerdo con el Observatorio de Mortalidad Materna, lo que significó volver a los niveles de hace una década. En las primeras cuatro semanas de 2021 el problema se ha agravado: 111 muertes, un 105% más que en enero del año pasado.
Hilda Argüello, secretaria técnica del observatorio, dice que la muerte materna era “un problema prepandemia”, pero desde mayo del año pasado los números empezaron a subir, principalmente por el Covid-19 y enfermedades respiratorias. Ese mes estos padecimientos fueron la causa de uno de cada cinco fallecimientos y al finalizar el año de tres de cada 10. En Quintana Roo, donde murieron 22 mujeres, la mortalidad materna en el segundo semestre del año pasado llegó hasta casi el doble de la cifra nacional: 85.9.
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Esta información fue publicada originalmente por Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad en: https://contralacorrupcion.mx/quintana-roo-morir-embarazada-por-la-pandemia/