Ubicada en el estado de Quintana Roo, Felipe Carrillo Puerto es una ciudad entre manglares, cascadas y el mar, pero no solo resalta en el mapa por su gran belleza natural, sino porque en este territorio se vivió la Guerra de Castas, por lo que también se le conoce como “Pueblo de Guerreros”.
El presidente de la Asociación de Cronistas de Quintana Roo y cronista de Felipe Carrillo Puerto, Mario Chan Collí, resalta en entrevista la importancia de este personaje histórico, también conocido como el Apóstol de la raza, y al que este año se le conmemora, porque no solamente se ha distinguido por haber sido un revolucionario que abarcó ideas socialistas, sino porque fue uno de los hombres más lúcidos que contribuyó a acabar en México con el régimen de la esclavitud.
Resaltó que entre las acciones del defensor del Mayab están el declarar de interés público la industria del henequén, el reparto de tierras y la socialización de la producción de ejidos, así como establecer el salario mínimo en Mérida, promulgar las leyes de previsión social y del trabajo, y el divorcio y la creación de cooperativas de producción y consumo.
En materia social, el entrevistado resaltó que Felipe Carrillo Puerto combatió el alcoholismo y el fanatismo religioso, fue aliado feminista y estableció servicios médicos y jurídicos gratuitos. También promovió la educación racionalista y fundó la Universidad Nacional del Sureste, hoy Universidad Autónoma de Yucatán.
Su labor con la cultura maya tampoco quedó atrás, ya que creó la Academia de la Lengua Maya, apoyó la exploración de hallazgos arqueológicos; instituyó los lunes culturales y tradujo al maya la Constitución de 1917. También promovió sus ideas y la trova a través de la radio “La Voz del Gran Partido Socialista”.
“La labor que realizó Felipe Carrillo Puerto como gobernante es permanente en la mentalidad del pueblo maya. Todavía en Tepich y Tihosuco, donde se luchó férreamente, nuestros abuelos platican cómo es que ahí se crearon comités del Partido Socialista de Yucatán, entre otras hazañas realizadas. Así es como la importancia de Felipe Carrillo Puerto remite a que, a parte de su atención a las comunidades mayas, se recuerde igualmente por la institución de la Escuela Nacionalista y todas las leyes que creó en general en materia social y cultural, son muchas actividades que realizó en la península de Yucatán, por eso su nombre pesa mucho en la comunidad y seguirá siendo todo un personaje para nosotros”.
El territorio que cambió de nombre de Santa Cruz a Felipe Carrillo Puerto el 27 de julio de 1934, cuenta con cuatro centros ceremoniales mayas y uno más en Tulúm, derivados de la guerra social maya, además en esta comunidad se está construyendo la estación Felipe Carrillo Puerto del Tren Maya, también se está realizando el proyecto “Puerta al Mar”, así como la creación del Museo Histórico de la Ciudad de Felipe Carrillo Puerto, espacio que busca albergar una historia de 174 años que reivindiquen el devenir de un lugar sagrado para los rebeldes mayas, que se aloja en lo que fue el internado indígena “Gral. Lázaro Cárdenas”.
Chan Collí es el encargado de La Casa de la Crónica FCP, donde también se encuentra el Museo José María Barrera, también conocido como Centro Holístico Maya, espacios que muestran documentos, piezas arqueológicas; así como objetos de madera o piedra e imágenes del proceso histórico de la ciudad, incluso, algunos durmientes del antiguo ferrocarril, molinos de mano y herramientas.
“El edificio es pequeño y pertenece al ayuntamiento de la ciudad, las piezas exhibidas las han proporcionado los mismos habitantes, por lo que de alguna manera se hace una labor de Museo Comunitario, labor muy diferente a la que se realizará en el próximo a inaugurarse Museo Histórico de la Ciudad de Felipe Carrillo”, dice el entrevistado.
Y agrega: “El espacio que coordino lo siento como un complemento, porque cuando vienen los niños tienen mucha curiosidad y se van directo a ver lo que les interesa. Esa es mi labor como cronista, tratar de explicarles a nuestros visitantes, como alumnos de educación básica, nivel superior e incluso de maestrías y doctorados, así como extranjeros que vienen de universidades de Alemania, China y otros países, todos interesados en el movimiento de la sublevación maya”.
En tanto, en el Centro Holístico Maya “José María Barrera”, donde se promueven talleres culturales, proyección de películas, lectura e interpretación de documentos históricos, recuperación de música y danza, así como la recuperación de instrumentos autóctonos, una labor que el maestro Mario Chan realiza junto con la Fundación Mundo Sustentable. Estos espacios abren de lunes a viernes de 8:00 h a 20:00 h.
El cronista de la ciudad recalca que “lo que corresponde a cada uno es dignificar la lucha de los abuelos mayas y ser difusores para que el resto del estado, conformado en su mayoría por mexicanos venidos por la atracción turística, conozcan y valoren la riqueza de nuestra cultura, le den el valor que necesita a la guerra de castas y, basados en nuestra historia, proponer un desarrollo para los hijos de los que lucharon por estas tierras que hoy por hoy han sido los más desprotegidos”.