En su 106 aniversario de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, que fue promulgada por el Poder Constituyente el día 05 de Febrero del año 1917, y que entró en vigor el 01 de mayo de ese mismo año, surgen para los juristas las siguientes reflexiones:
El texto original de nuestra Constitución, ya casi no existe con sus más de 750 reformas y adiciones llevadas a cabo del año 1917 hasta nuestros días.
Aunque son 136 artículos los que integran nuestra Carta Magna, la mayoría de ellos fueron reformados y adicionados, son extensos en su redacción y de difícil análisis y comprensión para el pueblo mexicano, por lo que debería tomarse en cuenta el estudio que practicó el Centro de Investigación de Estudios Jurídicos de la UNAM, para sintetizarlos y hacerlos más accesibles a los ciudadanos y con ello que las autoridades puedan hacer efectivos los mandamientos que se le imponen al Estado Mexicano.
De las grandes reformas a la Constitución se puede señalar el artículo 1° Constitucional (reforma del mes de junio del año 2011), la cual reconoce que los derechos humanos no solamente son aquellos consignados en los primeros veintinueve artículos de nuestra Ley Superior, sino también los expresados por los Tratados Internacionales, que México ha celebrado y ratificado el Senado de la República.
También las reformas al juicio de amparo, como medio de control constitucional, son benéficas y se encuentran consignadas en los artículos 103 y 107 de nuestra Constitución.
La Constitución debe ser respetada por parte de las autoridades y no pretender reformarla al antojo de los gobernantes, pues en el caso contrario, estaríamos en presencia de un régimen autoritario.
En el actual gobierno, se está pretendiendo aprobar leyes secundarias, que violentan a nuestra Carta Magna y como ejemplo se puede señalar el famoso plan B, para reformar diversas leyes en materia electoral, que están en contra de lo que se prevé en el artículo 41 de nuestra Constitución Política.
Ni se diga de la prórroga que se dio al ejército mexicano hasta el año dos mil veintiocho, para que siga en las calles, manteniendo supuestamente la seguridad nacional.
Los Diputados y Senadores, tienen la obligación de respetar la Constitución y no estar aprobando leyes que van en contra de la misma.
El día cinco de febrero del presente año, los Mexicanos debemos reflexionar de la importancia de nuestra Constitución y de la existencia de un sistema jurídico que evita el abuso de los actos de autoridad.
Actualmente los órganos encargados de mantener el equilibrio constitucional, se encuentran depositados en la Suprema Corte de Justicia de la Nación y en los Senadores que forman parte de grupos parlamentarios opositores a la 4T.
Ni se diga del INE (Instituto Nacional Electoral), al cual se le pretende reformar, siendo un órgano autónomo, que fortalece la democracia en México.
M.D. MIGUEL ÁNGEL TEJEDA ORTEGA.