Marilú Oseguera, cuentacuentos que desarrolla su labor en distintas casas de cultura y centros de creación del Distrito Federal, fue invitada a participar por primera ocasión en el ciclo Temprano cuentan los abuelos, que organiza los martes, cada 15 días, el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia, para lo cual eligió un texto de Ángeles Masttreta, titulado La cama.
La cita para este ciclo es a las 11:00 horas, en avenida Nuevo León 91, colonia Hipódromo Condesa, y cuenta con la colaboración del Foro Internacional de Narración Oral (FINO), que está dedicado a fomentar en los adultos mayores la preservación de las tradiciones de su comunidad mediante el ejercicio de la narración oral y la práctica del arte de la buena conversación.
Por ello en cada sesión los participantes, cuya edad mínima debe ser de 60 años, tienen la posibilidad de emprender, a través de su imaginación, aventuras, hazañas, peripecias y travesuras, junto con los audaces personajes de sus graciosas y sorprendentes narraciones orales.
La sesión en esta ocasión se desarrolló de manera fluida gracias a la pericia de Marilú Oseguera para narrar historias, para lo cual echa mano de algunos recursos teatrales y escénicos, sostenidos sólo por las intenciones e intensidades de su voz; el misterio y un cierto toque de terror, fueron la constante en sus textos, pues considera que esos géneros son el mejor recurso con los que cuenta para atrapar la atención del público.
«Es que la literatura para personas de nuestra edad es una gran provocación para seguir vivos, tanto en esta ocasión como en otras realizadas en distintos lugares, he descubierto que en primer término yo misma, al concluir, me siento llena de energía y con ganas de seguir leyendo y de vivir, por lo que esas emociones también surgen en los espectadores, por lo que entonces todo adquiere otra dimensión.
«Considero que la propuesta es muy interesante en ese sentido, porque nos brinda la oportunidad de entrar en contacto con la imaginación que provoca la literatura y en particular, en esta ocasión elegí a una autora como Ángeles Mastretta, que tiene un estilo muy mexicano de narrar, pues en sus historias aparecen elementos que encontramos en la vida cotidiana, en el campo de nuestro país, así que nos sentimos identificados con ella de inmediato».
Marilú Oseguera resaltó también que para lograr la empatía necesaria con el público, además de ser respetuosa del texto, agrega ciertas inflexiones de la voz y le da variedad a la intención de las frases, para de esa manera establecer una comunicación más eficiente con el público.
«Desde luego que no actúo las obras elegidas, eso sería otra cosa, pero sí intento hacerlas más atractivas al escucha, porque esa es la clave para mí de cómo desarrollar este tipo de presentaciones; recurrir a autores nacionales me parece muy importante, porque ellos son los que en este momento crean con sus obras nuestra identidad», indicó la narradora.