-
La publicación que obtuvó en España el Premio Biblioteca Breve 2011
Muestra un emotivo retrato de Leonora Carrington, trazado desde las largas décadas de amistad y complicidad entre la autora y la artista.
El libro Leonora pretende ser un tributo a una mujer prodigiosa, así como a una pintora única que es también una escritora inimitable: Leonora Carrington, expresó la autora Elena Poniatowska.
La presentación de este libro editado por Planeta contó con los comentarios del periodista Javier Aranda, la historiadora del arte Tere Arcq, los escritores Fabrizio Mejía Madrid y Alberto Ruy Sánchez, así como su autora, a quien el público que colmó la Sala Manuel M. Ponce manifestó su cariño en todo momento.
Leonora no sólo es una novela inspirada en la vida de Carrington, pues gracias a la visión de la escritora esta obra traza un panorama del momento en que el arte mexicano encuentra su desarrollo más vertiginoso, pero también es una especie de radiografía del espíritu del movimiento surrealista, sublimado en la pasión y padecer de la pintora.
Al hablar de la publicación, la también autora de ‘La noche de Tlatelolco’, refirió que ante todo ‘Leonora’ es una novela, no es ni una crítica de la pintura de Leonora Carrington, ni una biografía.
Precisó que es una obra basada en conversaciones que sostuvieron durante múltiples entrevistas, en los libros de la propia Leonora y en los que se han escrito sobre ella: el de Whitney Chadwick, el de Susan L. Alberth, el de Julotte Roche.
«Conocí a Leonora Carrington hace 50 años e inicié una novela en torno a su persona a la que le puseFiona. Cuando tenía 200 páginas pensé hacer una directamente sobre Leonora y me lancé. La primera entrevista que le hice apareció en el periódico Novedades, que ya no existe. A lo largo de los años, su casa en la calle de Chihuahua en la colonia Roma, se convirtió en la cueva de los sortilegios, una central de energía, una piedra imán.
«Leonora es una aproximación a lo que podría ser una exhaustiva biografía de Leonora Carrington. Si pudiera escribirla, lo haría con gusto, aunque esta novela puede estimular a otros a hablar de ella y convertirse en un surtidero de informaciones. En Leonora hay aún innumerables vertientes por descubrir», expresó Poniatowska.
«Por su estructura lingüística y porque sus líneas nos muestran la otra cara de la realidad, la otra orilla,Leonora es también un extenso poema donde la prosa se encabalga como el verso y las instantáneas de personajes como Picasso, Diego Rivera, Max Ernst, Benjamin Péret, Remedios Varo, Luis Buñuel, Salvador Dalí, André Breton, César Moro y Renato Leduc hacen un gran fresco de lo que fue la estética surrealista y su amor loco.
Leonora es una novela donde la imaginación está cargada de memoria y los recuerdos de una luminosidad desbordante. Mucho se ha escrito sobre Leonora Carrington, dudo que se escriba un texto más bello sobre ella que Leonora, de Poniatowska», expresó Aranda Luna.
El escritor Alberto Ruy Sánchez precisó que así como hay pintores que se especializan en los retratos, Elena Poniatowska es la escritora que mejor hace retratos en México. «Yo no conozco a nadie que pueda describir a una persona como lo hace Elena. La literatura que ella hace es completamente visual.
«Cuando supe que estaba haciendo el libro de Leonora me preguntaba cuánto falta para que llegue una escritora, joven o no, para que publique una novela que se llame Elena, y en esa novela este libro, Leonora, tendrá que ser uno de los capítulos del libro, porque creo que en éste, más que en otros, hay muchísimo de Elena», dijo.
La historiadora del arte Tere Arcq, quien recordó que este seis de abril Carrington cumplio 94 años de edad, subrayó que Leonora es un libro que tiene una investigación muy profunda. «Toda la historia, aunque la hace de una manera novelada, está basada en datos históricos muy precisos que implican una investigación de años en un tema tan complejo como es el surrealismo. Es un lienzo en movimiento».
Tras dar algunos datos biográficos sobre la pintora, Arcq realizó algunas observaciones sobre el trabajo pictórico de Carrington. «A partir de su llegada a México, concibió un poderoso conjunto visionario de pinturas y escritos que representan mundos alternativos donde las relaciones de espacio y tiempo se trastocan y la línea divisoria entre lo real y lo imaginario parece borrarse.
«Sus lienzos, realizados con una novedosa estructura narrativa y una técnica magistral, están poblados de personajes y escenas misteriosas. Carrington le dio un gran énfasis a la técnica pictórica trabajada con diversos procedimientos que darán lugar a mezclas de espacios nebulosos logrados con técnicas como el frottage, que contrastan con minuciosos detalles pintados con el pincel. Sus pinturas denotan un estilo libre y espontáneo con pinceladas diáfanas y una rica paleta de colores.
«A través de una intrigante serie de pinturas, Leonora Carrington plasmó una interpretación personal de sus propias investigaciones acerca de la alquimia, la magia, el tarot, la astrología y en las que la mujer es, sin lugar a dudas, la protagonista.
«A menudo se cuestiona la ausencia de motivos alusivos a México en la obra de Carrington. Con excepción del extraordinario mural El mundo mágico de los mayas, que representa su visión muy particular del sincretismo religioso entre las creencias de los antiguos mayas y del catolicismo de la zona de Chiapas, existen sólo breves alusiones como la incorporación de un comal y metate, mazorcas de maíz y chile.
«Considero que la influencia que este país ejerció en Carrington está ligada al contexto histórico y cultural de México, marcado por la conjunción de tradiciones ancestrales vinculadas al chamanismo, con las tradiciones espiritistas, ocultistas y herméticas que se entremezclaron en este país desde el siglo XIX», concluyó la especialista en surrealismo.